Mi experiencia en el centro Sopeña Las Palmas
Mi experiencia en el centro Sopeña Las Palmas, sería difícil resumirla, pues ha sido una completa montaña rusa de emociones, la mayoría buenas, en la que he conseguido formarme tanto como alumno y como persona, donde he podido disfrutar de los estudios después de mucho tiempo.
Tras la llegada al centro me sentía nervioso por lo que podía pasar, por si el nivel de estudio me podía superar, pero conforme pasaron los días, conseguí adaptarme cómodamente, gracias a mis compañeros y a los profesores, profesores que no solo me enseñaron acorde a sus asignaturas, sino que también me enseñaron valores, que ni yo mismo conocía. Me ayudaron a superar baches, pues todo el mundo tiene dificultades, y una mano nunca viene mal.
Destacar a mis compañeros, que me acogieron bien hasta el punto de tener una buena convivencia plena con todos, sin excluir a ninguno, llegando a hacer nuevas amistades, pero no de esas que dices que son tus amigos y ya está, sino de los que tú puedes decir con total firmeza y seguridad, que esas personas son buenos amigos, esos que te extienden la mano cuando te hace falta, personas con las que pasé estos cuatro años y me ayudaron a disfrutarlo.
La evolución de un año a otro era impresionante. El como pasas de tener una experiencia donde te sientes tímido, a una donde te sientes libre, a gusto, llegando a creer que estás en tu segunda casa. El hecho de acostumbrarte rápido a un lugar , es significado de confort. Sí que es verdad que he tenido experiencias malas, pero experiencias que me han ayudado a mejorar, que me han preparado para situaciones que nunca había experimentado.
Otro aspecto a destacar que he vivido, son las celebraciones que se han realizado durante las diferentes épocas del año, consiguiendo que haya una mayor conexión entre alumnos, y alumnos y profesores; celebraciones divertidas y entretenidas que crearon buenos momentos para conmemorar, que irán a una parte de mi mente junto a esos recuerdos que me causan nostalgia. Y ahora, en momentos como estos, donde nos encontramos separados unos de otros pero a la misma vez juntos por mantener esa conexión, es bueno recordar dichos momentos entre compañeros, que espero que sigan así para siempre. Que los recuerdos de Sopeña nos mantengan en contacto, para conmemorar nuestros viejos momentos, haciendo que este adiós se convierta en un hasta luego, y que nunca nos olvidemos unos de otros.
Así que tengo que dar las gracias a todos aquellos que me han acompañado durante estos cuatro maravillosos años, a quienes les debo el como soy, pues esto también me ha hecho forjar parte de mi personalidad, y quiero hacerle saber que si en la vida se me diese la oportunidad de repetir un momento de mi vida, sin duda elegiría esta odisea.